La comarca de Tarazona y el Moncayo se extiende por las cumbres de la Sierra del Moncayo hacia la depresión del Ebro. Una comarca que combina paisajes increíbles, con una gastronomía espectacular.
El Moncayo es el principal protagonista de esta comarca. Su pico es el pico más alto de la cordillera ibérica y dentro de él se encuentra el Espacio Nacional Protegido del Parque Natural del Moncayo que se sitúa junto a dos lugares de importancia comunitaria, como son el propio Moncayo y Maderuela.
En cuanto a su naturaleza también cabe destacar su zona protegida para aves que abarca la Sierra de Moncayo, los Fayos y Sierra de Armas.
La zona cuenta con pequeños núcleos rurales, pero también con municipios mucho más grandes.
Rodéate de naturaleza y descansa en una de estas preciosas casas rurales en Tarazona y Moncayo que hemos seleccionado para ti.
Naturaleza a flor de piel
Su paisaje kárstico nos deja disfrutar de circos glaciares y, vegetación y fauna como hayedos, encinares o robledales.
Su territorio es zona colindante con las provincias de Navarra, Soria y La Rioja.
La comarca de Tarazona y el Moncayo cuenta con un paisaje muy rico, pero si mencionamos la palabra rico, tenemos que hacer mención a su gastronomía. ¡Qué bien se come aquí!
Especialidades gastronómicas de Tarazona y el Moncayo
Dentro de su gastronomía, algunas especialidades de la zona son las gallinas en pepitoria, el conejo cocinado con salsa de almendra, el caldo de gallina de parida o el pavo trufado.
Por supuesto, sus platos tradicionales y típicos aragoneses como las migas o el ternasco asado. Pero vais a ver como la zona tiene un montón de productos y platos típicos que merecen ser probados.
¡No esperéis más y degustar algunos de los productos que os mencionamos a continuación! Por cierto, si queréis disfrutar de lo lindo de la gastronomía en la zona, os recomendamos que visitéis la Comarca y sus establecimientos en el mes de noviembre, durante el evento “De Tapeo con los Béquer”, ¡os encantará!
Productos típicos de Tarazona y el Moncayo
La verdura, indiscutibles alimentos saludables
Un protagonista con mucha fibra es la verdura. La tierra de la vega del Queiles nos ofrece verduras muy sabrosas como las borrajas, alcachofas, acelgas, espárragos, berenjenas, calabacines y muchas más.
La coliflor de Tarazona también tiene muy buena reputación, su textura y sabor te encantará.
Las frutas
Con el calor siempre entra muy bien la fruta aunque desde luego es un manjar que se puede degustar durante todo el año y más para aquellos que les encanta añadirla en su día a día.
De la zona destacan los melocotones, albaricoques y ciruelas que cuentan con un aroma y sabor que no se pueden comparar.
El Moncayo nos ofrece también variedades que son muy típicas como son los frutos del bosque, arándanos, moras, fresas y un tipo especial de frambuesa que es muy típica del Moncayo y recibe el nombre de Chordón.
Y, no sólo se puede comer la fruta fresca, sino que también hace años, servía y se utilizaba para hacer la base de los licores con un proceso de fermentación y maceración. Recetas con cientos de años pero que hoy en día se siguen haciendo.
Las legumbres, un producto autóctono
Las legumbres son otro condimento que no puede faltar en los platos de la zona. Las judías blancas se llevan todo el protagonismo. El nombre que reciben coloquialmente son “pochas”convirtiéndose en unas legumbres muy tiernas.
Las setas y hongos
Cuando llega el otoño, el Moncayo se llena de setas y nos deja variedades como los rebollones, boletus, setas de cardo, champiñón silvestre y más variedades de hongos que le dan un aporte extra de sabor a nuestros platos.
Productos cárnicos de excelente calidad
Cuando hablamos de carne y más si nos referimos a esta zona del Moncayo, el corral ha sido el gran proveedor de la despensa aragonesa. Nunca han faltado los platos con carne. Aves, conejos, patos o pavos son la clave para los suculentos guisos que se cocinan.
A pesar de la climatología dura que se sufre en la zona, la ganadería ovina ha generado recursos importantes. La carne del ternasco del Moncayo es de altísima calidad, de color rosado, muy jugosa y tierna. En la cocina aragonesa se utiliza en muchos de sus cocidos y platos.
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De hecho, en Tarazona y el Moncayo existe una cabaña ganadera ovina que es la más representativa de la zona llamada “Rasa Aragonesa”.
El cordero de lechal, el pollo al chilindrón o el pavo trufado también son platos estrella.
El aceite de oliva, la esencia del Moncayo
El olivo es un árbol milenario y del que hace miles de años el ser humano extrae sus olivas y crean el oro líquido tan utilizado en la cocina española y deseado por otros muchos países para dar un toque especial es sus platos.
Gobierno de Aragón
En 2007, se constituyó la Asociación de Productores de Aceite de la Sierra de Moncayo, cuyo organismo promueve la Denominación de Origen con una producción que ronda entorno a los 300.000 litros de aceite y el cual da trabajo a unos 2.300 productores.
El vino de Garnacha, el retrato de España
La garnacha se extiende a los pies del Moncayo. Es originaria de Aragón. Su clima, extremadamente caluroso en verano y muy frío en invierno, hace que se pueda elaborar garnachas muy especiales.
Otros productos
Otros productos típicos de la zona son las patatas agrias que son utilizadas para cocinar los platos de toda la vida como el rancho o las “patatas a la malonera” que son cocidas en leche y sirven de complemento para el asado de ternasco.
La miel con variedades exquisitas como la miel de flores, de bosque, de mielato o Monofloral. Todas ellas muy sabrosas que nos dan un aporte extra de energía.
O los quesos de origen artesanal que se convierten en una seña de identidad de la gastronomía aragonesa. Son elaborados por pequeñas empresas con mucho cariño, dando lugar a productos de excelente calidad y hechos de forma natural a base de leche cruda.
En la zona del Moncayo no sólo podemos degustar su gastronomía como hemos ido viendo sino que el paisaje y su territorio nos obsequia con rutas que merecen ser recorridas por su paisaje y además, nos deja lugares de mucho interés que son catalogados como Bienes de Interés Cultural como es el monasterio de Santa María de Veruela y el castillo de Vera de Moncayo, la Catedral de Santa María de la Huerta, la iglesia de Santa María Magdalena y las murallas en Tarazona, el castillo de Novallas o la torre de samanes de Cunchillos, entre otros muchos.
Además de monumentos de este tipo, también encontramos una zona arqueológica donde se encuentra el yacimiento de La Oruña, en Vera de Moncayo y por supuesto, cabe destacar el conjunto histórico como ha sido declarado Tarazona.
No cabe duda de que, si la gastronomía es buena, también suele ir acompañada por un buen paisaje y por tierras más que propicias para el cultivo de buenos productos gastronómicos, como es el caso de la Comarca de Tarazona y Moncayo.
