Hoy en día, muchas personas quieren conocer cómo se realizan algunos de los productos gastronómicos más codiciados de nuestro país. Ya sucedió hace décadas con el enoturismo.
Ahora, muchos se preguntan sobre la producción del oro líquido, uno de los productos más característicos de España. Efectivamente, hoy os hablamos sobre el aceite de oliva y de una actividad que está más en auge: el oleoturismo.
No cabe la menor duda de que el turismo cada vez se está volviendo más específico. El turismo gastronómico, sin ir más lejos, está yendo en ese sentido. Más personas quieren saber cómo se realizan algunos productos, tal y como sucede con el agroturismo.
Todo ello, unido al aumento de las actividades en plena naturaleza, da como lugar que más y más fincas ofrezcan estos servicios. Por eso, aquí vamos a hablar sobre qué es el oleoturismo, las actividades que se relacionan y sí, te0 hablaremos de algunos alojamientos rurales que ofrecen el oleoturismo como una de sus principales actividades.
¿Qué es el Oleoturismo?
Se podría definir el oleoturismo como toda actividad de carácter turístico que esté vinculada con el aceite de oliva. Es decir, concierne a un conjunto de actividades por las cuales el turista adquiere una mayor conciencia de cómo se produce el aceite de oliva, desde la recogida de la oliva a su tratamiento en las almazaras o incluso la degustación del producto final.
En este sentido, cabe recalcar que España es el país perfecto para todo amante de esta actividad. Hay que recordar que España es el mayor productor de AOVE de todo el mundo, del aceite de oliva de mayor calidad posible.
El Oleoturismo y sus Actividades
Como ya hemos comentado anteriormente, existen numerosas actividades que se puedan relacionar con el oleoturismo. Actividades que van desde conocer cómo se recoge al oliva, de recorrer campos de olivos o de poder degustar el producto final.
La Aceituna y su Recogida
La visita a olivares puede constituir una de las actividades iníciales más interesantes, puesto que se produce al aire libre y permite conocer, más de cerca, el mundo del campo. Lo mejor de todo es que se puede conocer el olivar en distintas fases y con diferentes procesos. Una de las etapas más fascinantes, dentro del olivar, es la recogida de la aceituna, la cual se comienza a realizar desde finales de octubre.
El visitante puede aprender cómo se realiza la recolección o cómo se elige la aceituna en su momento justo, colocando la red o vareando, por poner algunos ejemplos. Otros momentos interesantes para conocer el olivar es la floración de los olivos o la poda, siendo fundamentales para el posterior cultivo de la aceituna.
Descubrir cómo se produce el Aceite
Otro de los puntos clave que desea conocer un apasionado por el aciete de oliva es cómo se llega a producir. ¿Cómo se de tener aceitunas a conseguir el preciado oro líquido? Todo ello se da en la almazara. Aquí, es donde podrás conocer todo el proceso para obtener el aceite de oliva.
Dentro de la almazara, el visitante podrá conocer diferentes procesos, comenzando por el de la recepción y limpieza de la materia prima, siguiendo con la molturación y la extracción del aceite. En la almazara se produce también la separación del zumo del aceite del denominado alperujo y el almacenaje del mismo.
Degustación del Aceite de Oliva
Al igual que sucede con el vino, el oleoturismo culmina con una cata. En este caso, el visitante puede degustar el aceite de oliva, descubrir sus matices y las variedades con las que se ha creado.
En diversas fincas se realizan actividades de cata, con talleres explicativos y pruebas técnicas para poder paladear este maravilloso producto, cumplimentando una ficha técnica. Por supuesto, el maridaje no queda exento. Conociendo aquellos productos con los que poder sacarle un mayor partido a su sabor.
Alojamientos que ofrecen Actividades de Oleoturismo
El oleoturismo es una actividad que encaja a las mil maravillas con el turismo rural. Hablamos de una actividad en pleno campo, que trata sobre producción agrícola y que da uno de los productos más preciados de nuestro país. Todo ello, gracias a un meticuloso y apasionante proceso.
En Sensación Rural, podemos encontrar algunos alojamientos rurales que incluyen el oleoturismo como una de sus principales actividades. Seguro que te encantan.
Finca Heredad La Boquilla (Enguera, Valencia)
Situado en la Sierra de Enguera, el propio entorno de la finca Heredad de La Boquilla es una pasada. Enfrente de la masía, se extiende un olivar compuesto por 10.000 olivos de variedad arbequina y 1.000 koroneikis, creando un paisaje único para su contemplación.
La casa, cuya ocupación máxima es de 14 personas, dispone de jardín, piscina y granja. Ahora bien, si se distingue por algo es por la pasión por el olivar y por el aceite de oliva. Podrás pasear por la finca, ¡incluso plantar tu propio olivo!
Asimismo, en temporada de recolección, podrás participar en la molturación de la oliva, a través de la extracción en frío, de forma ecológica. Por supuesto, podrás probar el AOVE que producen en la finca: Birdy. En definitiva, en Finca La Heredad La Boquilla podrás realizar todas las actividades relacionadas con el oleoturismo.
Molino Jabonero (Villanueva del Trabuco, Málaga)
Nuestro siguiente destino nos lleva al Valle del Gaudalhorce, en Málaga. Una zona repleta de campos de olivas y donde la elaboración del aceite de oliva es toda una arraigada tradición. Tal es así que aquí han surgido iniciativas de lo más interesantes, como es la “Ruta del Olivo”, al que está adscrito Molino Jabonero, en Villanueva del Trabuco.
El Molino Jabonero está construido por varios alojamientos rurales independientes, en mitad del campo, y suponen una excelente oportunidad para adentrarse en la cultura del aceite. La finca está constituida por numerosos elementos vinculados a la elaboración el oro líquido: una almazara tradicional y un conjunto reconocido como patrimonio etnográfico andaluz.
Aquí, podrá conocer cómo es una finca tradicional de olivos, desde que el árbol es apenas un recién nacido hasta que se convierte en un anciano centenario. Por supuesto, también podrá comprobar de primera mano los métodos tradicionales de extracción del aceite, junto con la correspondiente degustación de tan magnífico manjar, ¡como no podía ser menos!
Cal Pubill (Ginestar, Tarragona)
Cal Pubill es un alojamiento turístico ubicado en una antigua casa señorial de principios del siglo XX de Ginestar, en la Ribera del Ebro. Una casa increíble, de lujo, con una capacidad de hasta 19 personas que te enamorará.
Lo mejor de todo es que, desde aquí podrás descubrir una de las zonas más interesantes del interior de Tarragona. Una zona tranquila que sobresale por sus árboles frutales, viñas y oliveras. Es decir, un sitio perfecto para los amantes del enoturismo y del oleoturismo.
Tal es así que los propietarios de la casa pueden ofrecer visitas y degustaciones en bodega, así como vistas a la almazara en la que se produce el aceite de oliva Suñer. Podrás pasear entre los olivares y, cómo no, conocer el proceso de fabricación de su AOVE. Para finalizar la visita, podrás catar 4 de sus aceites de oliva, con el fin de detectar sus características organolépticas.
Cortijo El Rincón (Villanueva de Bogas, Toledo)
Los Montes de Toledo es otro de los preciosos parajes de España en los que poder contemplar hileras infinitas de olivos. Una zona en la que, debido a su tradición aceitera, ofrece un sinfín de actividades relacionadas con el oleoturismo.
El ejemplo perfecto lo podemos encontrar en El Cortijo del Rincón, una antigua casa de labranza del siglo XX de Villanueva de Bogas que ha sido perfectamente rehabilitada, con capacidad para 15 personas. Un alojamiento cómodo, con estancias amplias y una decoración cuidada.
La casa está dentro de una finca de explotación agrícola donde el olivar es el principal protagonista. El alojamiento está enclavado entre olivos, en una finca única. Podrás pasear entre ellos y ver cómo se cultivan para la posterior producción de aceite. Además, te ofrece la oportunidad de ver todo el proceso de elaboración del AOVE en la localidad de Mora.
Finca El Cabezo (San Martín de Trevejo, Cáceres)
La Sierra de Gata es un entorno único para desconectar durante unos días. ¿Razones para visitarla? Contamos con numerosas, desde conocer sus bellos pueblos a conocer sus hermosos paisajes y los ricos frutos que ahí se cultivan.
En este caso, queremos que le eches un ojo a la Finca El Cabezo, en las afueras del precioso y coqueto pueblo de San Martín de Trevejo. Además del impresionante alojamiento que se asiente en la misma finca, lo más interesante reside en todas las propuestas vinculadas al agroturismo que hay en el terreno.
Desde la visita a animales de granja a la recogida de frutos, en Finca El Cabezo conocerás, de verdad, lo que es la vida en el campo. E la misma finca tienen un campo de olivos y elaboran su aceite de oliva, procedente de la manzanilla cacereña de árboles centenarios. Podrás participar en tareas como la recolección o la moltura de la misma aceituna.
Maset de la Costa (Piera, Barcelona)
El Valle de la Anoia es una de las zonas donde el enoturismo y el oleoturismo han tenido un mayor auge, gracias a la tradición agrícola de la zona. Solo hay que echar un vistazo a alojamientos tan encantadores como Maset de la Costa, en Piera, para poder comprobarlo.
Hablamos de una antigua masía del siglo XVI que tiene capacidad para 15 personas y con piscina. Un alojamiento que es único con tan solo ver el entorno en el que se encuentra, rodeado de viñedos y olivares, donde la principal premisa es la tranquilidad y conectar con la naturaleza.
Para ello, el oleoturismo es ideal, con experiencias de lo más variopintas. En Maset de la Costa puedes participar en la recogida de la aceituna o apadrinar un olivo. Además de actividades más comunes sobre el oleoturismo como un taller de cata o paseos entre olivares, en el alojamiento se ofrecen talleres para realizar jabón ecológico artesanal.
Alojamiento Rural El Vergel (Cazorla, Jaén)
La provincia de Jaén es famosa por su extenso mar de olivos. En total, se calcula que hay 65 millones de olivos en todo su territorio, ¡una auténtica pasada! Sabiendo esto, no cabe la menor duda de que aquí podrás encontrar diferentes lugares donde ofrecen actividades como el oleoturismo.
Sin ir más lejos, en este caso os vamos a hablar del Alojamiento Rural El Vergel, situado en el precioso pueblo de Cazorla. Es una casa con piscina, con capacidad para 8 personas y que está rodeado de olivos.
Desde esta casa rural se proponen diferentes actividades, entre las que se encuentra la visita a una cooperativa de la zona en la que poder aprender cómo se produce el maravilloso AOVE de esta zona, principalmente de la variedad Picual y Hojiblanca.
Complejo Turimaestrat (Sant Mateu, Castellón)
El Bajo Maestrazgo, en la provincia de Castellón, es otro de los mejores destinos para el oleoturismo. En este caso, si visitas la zona, te recomiendo que lo hagas en el Complejo Rural Turimaestrat, donde disponen de numerosos alojamientos y estudios para ir en familia y amigos, perfectamente equipados.
Pues bien, uno de las actividades que más fomentan es la degustación de productos de la zona, donde no podía faltar el aceite de oliva del Bajo Maestrazgo. En Sant Mateu, se elaboran aceites provenientes de olivos centenarios, surtiendo este magnífico producto a restaurantes y tiendas de toda la comarca.
En Turimastrat, organizan catas de aceite y lo engloban dentro de la de otros riquísimos productos de la zona, como sus embutidos. Todo ello, con el objetivo de que los huéspedes se sumerjan de lleno en la increíble gastronomía del Bajo Maestrazgo.
Can Barrull (Sant Feliu de Boada, Girona)
El interior de la Costa Brava tiene infinidad de atractivos para el visitante. Puedes conocer pueblos de gran belleza, como Pals o Peratallada, así como inmiscuirte en el encanto rural de la zona. El Baix Empordà es uno de los mejores destinos de nuestro país para hacerlo, sin lugar a dudas.
Uno de los mejores alojamientos rurales que se encargan de proporcionar una experiencia única, como sucede en Can Barrull. Es una pequeña masía dedicada enfocada a las escapadas en pareja y donde el oleoturismo es también protagonista. No en vano, en la finca en la que se enclava Can Barrull se produce su propio aceite de oliva ecológico.
Can Barrull produce aceites de la variedad arbequina, argudell, koroneiki y arbosana, todas de cosecha. Todas en su almazara y de forma artesanal. Un aceite de extracción en frío que realizar una cata de su aceite, junto con una visita guiada entre los campos de olivos o a la misma almazara.
Como puedes ver, hay muchas actividades referentes al oleoturismo que son perfectas para hacer en familia. Diferentes actividades para poder realizar un turismo diferente, con el aceite de oliva como protagonista.