La cultura del vino inunda cada uno de los rincones de La Rioja Alta. La región más occidental de la comunidad riojana es la más turística de las 3 para los amantes del enoturismo, aunque hay otros muchos alicientes que te enamorarán.
En este sentido, el patrimonio histórico y cultural de la región, más allá de la tradición vinícola, es también de lo más destacable. Aquí, sobresalen pequeñas localidades muy bien conservadas en el tiempo, impresionantes monasterios o incluso catedrales. De todo eso vamos a hablar, viendo algunos de los pueblos más bonitos de La Rioja Alta.
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La Rioja Alta por sus Bellos Pueblos
En total, hemos elegido 10 preciosos pueblos de La Rioja para que puedas hacer una rutade varios días. Una forma maravillosa de conocer esta región, ¡te encantará!
1. Santo Domingo de la Calzada
Santo Domingo de la Calzada es uno de los pueblos más encantadores de La Rioja Alta. Guarda una estrecha relación con la figura del santo Domingo y la antigua calzada romana. De ahí el nombre de la localidad. Fue en este lugar donde el ermitaño lideró las obras que culminaron en la construcción del puente que permitiría cruzar el río Oja, así como en la fundación del Hospital de Peregrinos.
Aristoteles
Su recorrido de calles medievales, nos descubre un rico patrimonio que es la esencia del lugar y en el que destacan sus murallas y la Catedral del Salvador, de origen románico. No podemos hablar de esta localidad sin mencionar la importancia que tuvo su Hospital de Peregrinos desde el Siglo XII y reformado en el siglo XV, el cual alberga actualmente un parador nacional.
2. Briones
Rodeado de viñedos, Briones se alza majestuosamente en una colina, convirtiéndose en uno de los pueblos más emblemáticos de La Rioja Alta. Además, posee un valioso patrimonio arquitectónico que ha sido reconocido como Bien de Interés Cultural en la categoría de Conjunto Histórico-Artístico. Un ejemplo destacado de este patrimonio es la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, una joya del siglo XVI en el estilo gótico isabelino que merece una visita obligada.
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Asimismo, te extendemos una invitación para descubrir otros tesoros de Briones, como su Ayuntamiento, la Ermita de San Juan del siglo XVIII y el Museo Etnográfico ubicado en el Palacio del Marqués de San Nicolás, una elegante mansión barroca del siglo XVIII. También puedes explorar el Palacio de los Quincoces, del siglo XVI, o el Palacio de los Gadea, del siglo XVIII. Por último, te sugerimos visitar el Museo Vivanco de la Cultura del Vino, que incluye bodegas y un museo dedicado al fascinante mundo del vino.
3. Haro
Haro destaca por su renombrada producción de vinos, así como por la amalgama de paisajes, cultura, gastronomía y un rico patrimonio artístico y cultural. Estos factores hacen de este destino un lugar idílico para explorar durante tu visita. Te invitamos a dar un tranquilo paseo por sus encantadoras calles, especialmente por “La Herradura”, que forma parte del casco histórico, declarado Bien de Interés Histórico desde 1975.
Graeme Churchard
Uno de los puntos más emblemáticos de Haro es la impresionante Basílica de la Virgen de la Vega, de estilo barroco, que fue erigida a principios del siglo XVIII. Asimismo, no podemos dejar de mencionar la magnífica Iglesia de Santo Tomás Apóstol, una verdadera joya arquitectónica que fusiona los estilos tardogótico, renacentista y barroco. Tampoco puedes perderte la oportunidad de visitar la Ermita de San Felices, desde donde podrás disfrutar de vistas panorámicas incomparables.
4. Viniegra de Abajo
Viniegra de Abajo nos da la bienvenida con una estampa verdaderamente inolvidable. Se halla rodeado de exuberantes colinas, donde emergen estas preciosas casas de piedra y mampostería de tono rojizo. Es un enclave que goza de un entorno natural excepcional y atesora un valioso patrimonio histórico, lo que lo convierte en un destino que merece indudablemente una visita, lo que le ha valido para ser considerado uno de los pueblos más bonitos de España.
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Uno de los monumentos que destaca es la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, del siglo XVI, así como la antigua escuela. Entre los atractivos turísticos de este rincón, destacan los diversos palacios y residencias de estilo indianos. Estas elegantes edificaciones fueron de la década de los años 20 por emigrantes argentinos. Ejemplos de ello son la Casa de Pedro Montero, la Casa de Nemesio Sangrador Bernalded, o la de Pedro Juan Manzanares Llorente.
5. Sajazarra
Sajazarra se encuentra en un entorno verdaderamente privilegiado, donde la majestuosidad de su ubicación es sencillamente excepcional. Este pintoresco rincón se halla en la confluencia de los caudalosos ríos Aguanal y Ea, forjando así un destino turístico de inigualable atractivo. Pasear por las sinuosas callejuelas medievales es como un viaje en el tiempo, transportándonos de manera inexorable a los albores del siglo XI.
Santiago López-Pastor
Este idílico pueblo deslumbra por la fusión armónica entre su entorno natural deslumbrante y su legado patrimonial. Sin lugar a dudas, uno de los tesoros más preeminentes que resalta en Sajazarra es su imponente castillo erigido en el siglo XV, una estructura que se distingue por su sobresaliente estado de conservación y que, en la actualidad, alberga una de las bodegas más destacadas de toda la región de La Rioja Alta.
6. Ezcaray
Ezcaray obtuvo en 1998 el honor de convertirse en la primera población de La Rioja en recibir el título de Municipio de Interés Turístico. Esta distinción se ganó gracias a la abundancia de atractivos que ofrece a lo largo de todas las estaciones del año, lo que refleja el reconocimiento del encanto que desprende este pueblo.
Zarateman
Ezcaray se caracteriza por sus calles empedradas, sus coloridas fachadas de estilo montañés y palaciego, y sus balcones adornados con flores. La Real Fábrica de Paños, la iglesia de Santa María la Mayor y la ermita de la Virgen de Allende son solo algunos ejemplos de su inconfundible encanto. Todo esto, unido a su afamada gastronomía, lo convierte en un destino imprescindible para una escapada de fin de semana.
7. Cuzcurrita del Río Tirón
La región de La Rioja Alta alberga pueblos maravillosos y relativamente desconocidos para el gran público. Más allá de lugares como Haro o Sajazarra, existen otros rincones igualmente encantadores pero menos célebres. En esta ocasión, deseamos destacar a Cuzcurrita del Río Tirón, un pueblo que sin duda merece una visita.
Paula Hernández
Bañado por las aguas del río Tirón y rodeado de viñedos, cautiva a los visitantes con su arquitectura medieval que ha perdurado a lo largo del tiempo. Puedes comprobarlo al explorar su casco antiguo. Allí, encontrarás con numerosas viviendas construidas en sillar, así como con la Iglesia de San Miguel; del siglo XVIII, o su imponente castillo, del siglo XIV.
8. San Millán de la Cogolla
San Millán de la Cogolla está a los pies de la imponente Sierra de la Demanda. Fue fundado en honor al santo que le da nombre y posee una profunda conexión histórica con el Camino de Santiago. Sus raíces se remontan al siglo VI, convirtiéndose más en uno de los centros culturales más relevantes de Europa durante la Edad Media.
Xiquinho Silva
Esta rica herencia perdura hasta el día de hoy, reflejándose en la distinción de Patrimonio de la Humanidad otorgada a los magníficos conjuntos arquitectónicos de los Monasterios de Suso y Yuso, construidos entre los siglos XI y XII. Ambos monasterios forman parte de la Ruta de la Lengua Castellana y conforman una de las rutas culturales más interesantes de La Rioja Alta.
9. Casalarreina
Enclavado en el idílico valle del río Oja, puedes encontrar el pueblo de Casalarreina. De tradición ganadera y agrícola, su mayor atractivo radica en su cultural, reconocido como conjunto histórico desde el año 1975. Históricamente, Casalarreina es conocida por ser el lugar de residencia de Juana I de Castilla, más conocida como Juana “la Loca”, lo que dio origen a su denominación actual.
Luis Villa del Campo
Al adentrarse en este recóndito rincón, te brindará la oportunidad de deleitarte con su exquisita culinaria. Te asombrarás ante los majestuosos conjuntos arquitectónicos que este lugar alberga, como el Convento Dominico de Nuestra Señora de la Piedad, del siglo XVI. Otra joya de valor incalculable es el Palacio de los Condestables de Castilla, la insustituible gema de Casalarreina, que fungió como morada tanto para Juana “la Loca” como para el Papa Adriano VI.
10. Nájera
Muy cerca de Logroño, encontramos esta localidad a orillas del río Najerilla, que ocupa un lugar central en el tramo riojano del Camino de Santiago. De hecho, esta ruta jacobea atraviesa las mismas calles del núcleo urbano de la villa. El nombre de este pueblo, Nájera, tiene sus raíces en el término árabe “Naxara”, que significa “lugar entre peñas”.
Carlos Teixidor
En Nájera, podemos visitar el Convento de Santa Elena, que data del siglo XVII y combina elementos de los estilos gótico y renacentista. Además, en este lugar se encuentra el Panteón de Reyes, donde descansan los restos de destacados nobles españoles como Blanca de Navarra, los Duques de Nájera y Diego López de Haro.