Aragón es “tierra de castillos” y esto se refleja en el gran número de increíbles fortalezas, que están repartidas por toda la provincia de Aragón. Es lo que vamos a poder comprobara a través de esta apasionante ruta por la historia, donde vamso a ver algunos de los castillos de Aragón más espectaculares.
Desde el Pirineo Oscense hasta Teruel, el horizonte aragonés está salpicado por la sobriedad de multitud de castillos, que aparecen en rincones estratégicos como: promontorios rocosos, encima de montañas, envueltos en la niebla, etc.
Todos ellos son auténticas fortalezas medievales y constituyen parte del rico patrimonio histórico aragonés, que puede presumir de ser uno de los mayores reclamos turísticos y culturales de la provincia de Aragón.
Breve Historia de los Castillos de Aragón
El origen de los castillos en tierras aragonesas es fruto de las continuas contiendas bélicas que tuvieron lugar durante de la Edad Media y que los convirtieron en testigos legendarios de apasionantes conquistas y disputas.
Los historiadores inciden en que fue durante la Reconquista Cristiana, en los siglos IX-X, cuando comenzó la historia de los castillos aragoneses y su declive se inició posteriormente, en el siglo XVI. Esta es la razón por la que hay fortalezas construidas en diferentes épocas.
Francis Raher
Señalar que las diferentes fortificaciones tenían un claro carácter defensivo, además de ser la residencia y símbolo de prestigio para muchos nobles y señores feudales.
Castillos de Aragón que tienes que visitar
Se dice que en la Edad Media, Aragón acogía a más de 500 castillos y fortalezas de diferente relevancia y estilo.
Lamentablemente, a fecha actual, se han perdido muchas de estas construcciones, pero todavía hay muchos castillos que siguen en pie y que son merecedores de ser conocidos.
Por eso, hemos preparado un recorrido por algunos de los castillos más impresionantes de Aragón, fortalezas que todavía siguen seduciendo a primera vista.
Juanedc
Debido al elevado número de castillos que hay en la provincia aragonesa, hemos tenido que elegir entre aquellos que merecen ser visitados alguna vez en la vida. Hemos elegido aquellos que se encuentran apartados de las grandes ciudades, ¡no es que nos hayamos olvidado de ellos!
Si quieres hacer una visita a una de estas increíbles fortalezas, te invitamos que lo hagas durante un fin de semana o en vacaciones, alojándote en una de las más de 1.000 casas rurales que tenemos en Aragón.
Así que si no tienes planes para tus próximas vacaciones. ¿qué te parecería realizar una ruta por los castillos más espectaculares de Aragón? Es una idea interesante y una buena manera de disfrutar del tiempo libre.
Así que quédate con nosotros y continúa leyendo, porque aquí van 15 castillos, donde no falta agregar nada más que historias y personajes de época.
1. Castillo de Loarre
El Castillo de Loarre es sin duda uno de los lugares más visitados de la provincia oscense, por ser uno de los castillos más importantes de Aragón, ubicado en la zona denominada como la Hoya de Huesca. Esta impresionante fortaleza data del siglo XI y fue construida bajo el reinado de Sancho III el Mayor, sobre un anterior castillo de origen romano.
Pero el Castillo de Loarre no solo destaca por su excelente posición estratégica y por su belleza arquitectónica, esta fortaleza siempre será recordada como una pieza clave en la reconquista en territorio aragonés.
Sergio Morchón
De esta edificación hay que destacar sus diez torres circulares, así como sus gruesos muros y su torre del homenaje, que merece una mención especial, debido a sus 22 metros de altura. En casi toda su totalidad fue elaborado en mampostería y a pesar de no usar casi la piedra, esto no impidió que esta fortaleza adquiriera una apariencia impenetrable.
En lo que a su conservación se refiere, es una de las fortalezas mejor conservados del territorio español, hasta el punto de haber sido declarada en1913 “Monumento Histórico Artístico”. Tras haberte presentado al majestuoso Castillo de Loarre, deberías visitar esta fortaleza y dejarte llevar por su misterioso encanto.
2. Castillo de los Calatravos
Hoy funciona como un parador y atractivo turístico, pero aún se ve, como si el tiempo no lo hubiese cambiado nada. El Castillo de los Calatravos está situado en la localidad de Alcañiz y sus edificaciones más antiguas datan de los siglos XII y XIII. Su ubicación en la parte superior de una loma, lo convierten en una fortaleza de ensueño.
Su aspecto ha ido evolucionando de castillo a palacio, a una cárcel, a un cuartel, fue también un cementerio y finalmente se convirtió en una esplendida residencia.
Paradores
El Castillo de los Calatravos fue diseñado de tal manera que en su parte más antigua se alzó la Torre del Homenaje y la Capilla, que datan de finales del siglo XII e inicios del siglo XIII y posteriormente en el siglo XIV se construyó el claustro.
Actualmente, tal como comentábamos al comienzo, esta fortaleza tras multitud de reformas, se ha transformado es un reconocido Parador, donde se puede disfrutar del palacio medieval y del palacio barroco, comunicados entre sí por el bello claustro del siglo XIV. ¡No pierdas la oportunidad de conocerlo!
3. Castillo de Sádaba
Al norte de Zaragoza, en la Comarca de Cinco Villas, se encuentra el Castillo de Sádaba, sobre el que no se sabe con exactitud la fecha de su edificación, pero gira en torno al siglo XI.
De este castillo se dice que fue protagonista de un gran número de conflictos bélicos y a pesar de ello, mantuvo un buen estado de conservación hasta el siglo XVI, cuando comenzó su lamentable deterioro.
Henar Lanchas
Lo más significativo del aspecto de esta sobria fortaleza construida en piedra lavada, es que no tiene ningún tipo de elemento defensivo, como pudiera ser la muralla, la torre del homenaje o el foso. Curiosamente, el carácter defensivo del Castillo de Sádaba viene dado únicamente por sus muros, que son de grandes dimensiones.
Tenemos que decir que la razón por la que actualmente el Castillo de Sábada ha recuperado todo su esplendor, ha sido porque la Diputación General de Aragón se ha encargado de su restauración, ya que durante muchos años esta edificación estuvo totalmente abandonada. ¡No te vayas de la provincia de Aragón, sin visitar esta bonita fortaleza!
4. Castillo de Peracense
Quien piense que en Aragón no hay castillos impresionantes está totalmente equivocado y muestra de ello es el Castillo de Perecense, emplazado en la localidad del mismo nombre, muy próximo a Teruel.
Este monumento de uso militar, se levantó en la primera mitad del siglo XIV y sobre su origen hay muchas dudas, ya que hay historiadores que apoyan la tesis de que esta edificación fue la defensa de una villa medieval llamada la Villeta y por el contrario hay quien cree, que sus ancestros son celtíberos y romanos, debido al hallazgo de unos restos de esta época.
Francis Raher
En cuanto a la razón por la que se construyo esta fortaleza, no fue otra que la puramente defensiva. Los reinos de Castilla y Aragón vivían en un continuo enfrentamiento y el Castillo de Perecense ayudó a evitar la posible entrada de las tropas castellanas en tierras aragonesas. ¿Y porque sorprende tanto conocer esta fortaleza? Por su forma de eslopón de un barco varado, en medio de la montaña, totalmente mimetizado con el paisaje.
Aparte de su curiosa apariencia, el Castillo de Peracense destaca por sus tres recintos bien diferenciados, que forman parte de una gran planta irregular. Tras visitarlo, lo que nos queda claro es que esta fortaleza domina el paisaje con su aspecto. Y por ello, no es de extrañar que cada vez sean más los turistas, que quieran conocerlo. ¿Eres tú uno de ellos?
5. Castillo de Monzón
Si te desplazas hasta la localidad de Monzón, podrás conocer este castillo, que hunde sus cimientos en un gran cerro.
Aunque el aspecto externo de esta sobria edificación data de los siglos XVII y XVIII, su construcción se llevo a cabo en el siglo XII por la Orden del Temple.
Francisco Martínez Arias
Lo más sobresaliente de todo su conjunto arquitectónico es su planta irregular, de la que forman parte cinco edificios separados entre sí, así como los restos de sus murallas, las caballerizas, el patio de armas y la torre del homenaje, que pueden ser visitados.
Además al acercarte al Castillo de Monzón observarás que a ambos lados de la entrada se encuentran la Torre de Jaime I y la Capilla, que desempeñaba las tareas de torreón. Cualquier visita a esta fortaleza declarada “Monumento Nacional” es un agradable viaje en el tiempo, que siempre recordarás.
6. Castillo de Biniés
Se trata de una fortaleza poco conocida, pero es uno de los castillos más sorprendentes de Aragón.
Situado en la comarca de La Jacetania, este castillo emerge en la pequeña localidad de Biniés, con sus cuatro torres gruesas de planta cuadrada.Situado en el interior del pueblo, el castillo original data del siglo XII.
Turol Jones
Sin embargo, en los siglos posteriores se realizaron multitud de reformas, como el palacio, que se incluyó en el siglo XVI. Su estilo arquitectónico predominante es el gótico.
Seguro que te sorprende su increíble esta de conservación y es que en la década de los 90 se hizo una profunda rehabilitación de toda la fortaleza. Además, desde las torres tienes unas vistas maravillosas de todo el Valle de Ansó, ¡te encantará!
7. Castillo del Sos del Rey Católico
Desde una elevada colina llamada Peña Feliciana, el Castillo de Sos del Rey Católico, controla el paisaje de las Cinco Villas, comarca donde se encuentra ubicado.
Esta fortaleza se levanto en el siglo X por orden del rey Sancho Garcés II de Pamplona, que pretendía con esta edificación fortalecer sus defensas ante la amenaza musulmana.
Canduela
Desafortunadamente, como consecuencia de los combates bélicos de aquella época, esta fortaleza fue derruida a finales del siglo X, pero se reconstruyó en el siglo XI.
Declarada “Conjunto Histórico Artístico”, el aspecto del Castillo de Sos es singular por su recinto amuralladlo, que aloja un torreón circular, una torre del homenaje y la Iglesia románica de San Esteban, donde el rey Fernando El Católico recibió el bautismo en 1452. ¡El Castillo de Sos de Rey Católico es una fortaleza que cualquiera debería explorar!
8. Castillo de Alquézar
En las proximidades del río Vero está situado el Castillo de Alquézar, en la localidad del mismo nombre y muy próximo a Barbastro. Recordar que tanto la fortaleza como la villa que la alberga, han sido declaradas “Monumento Histórico Artístico”.
Esta edificación de origen musulmán se alzó en el siglo IX por Jalaf Ibn Arad, pero años más tarde, en 1067, el Rey Sancho Ramírez la recuperó para la Corona Española. En realidad, se trata de un conjunto de diferentes construcciones de la Edad Media y del Renacimiento.
Turol Jones
Asentado sobre un montículo natural, casi toda la construcción está realizada con piedra y protegida por una muralla compuesta por tres torres. Te recomendamos observar sus almenas, que perfilan todo el conjunto arquitectónico, así como la capilla real y el claustro románico.
Por cierto, no olvides tomar una instantánea de su torre albarrana. ¡Merece la pena! Es sorprendente comprobar que ni los azares del tiempo, ni la historia, ni las guerras han conseguido destruir esta maravillosa fortaleza, que a fecha actual se encuentra en un excelente estado de conservación.
9. Torre de Biel
Nos dirigimos a las Cinco Villas, una preciosa comarca de Zaragoza, para descubrir otra de las fortalezas más impactantes de Aragón. Más concretamente, a la localidad de Biel. Se trata de una torre fortificada que sobresale por encima del resto de edificaciones, junto a la iglesia renacentista de San Martín de Tours.
Destaca no solo por sus excelsas dimensiones, con más de 30 metros de altura, sino por su forma rectangular.
Ipintza
Construida en el siglo XI, probablemente tenía una almenara en su parte más elevada, ahora sustituida por un tejado. Un lugar repleto de una gran importancia histórica, puesto que fue entregado por el Rey Sancho Ramírez (I de Aragón y V de Navarra) como dote a Felicia de Roucy, siendo considerado en la época como el Palacio del Rey.
Cayó en el olvido en el siglo XIII, para posteriormente ser un lugar de uso residencial por lo cual se realizaron diversas reformas, sobre todo en el siglo XVI.
10. Castillo de Benabarre
Antigua capital del condado de Ribagorza, Benabarre es una bella localidad con un increíble pasado. Buena parte de su historia se debe a su posición estratégica, en lo alto de un cerro. Esto es lo que motivó que los musulmanes construyeran un recinto fortificado a finales del siglo X.
Una vez el territorio fue reconquistado por el Rey Ramiro I, mandó construir un castillo que hacía las veces de residencia condal. A su vez, dentro del recinto, se levantó una iglesia románica del siglo XII, siendo reformada en el siglo XIV y dotándola del aspecto actual.
El Castillo de Benabarre ha sido escenario de numerosas batallas, ¡y no tan antiguas como se cree! Sufrió un gran deterioro en el siglo XVII, siendo reformado como fuerte en el siglo XIX, sobre todo para las Guerras Carlistas.
Si bien es cierto que no queda apenas ningún elemento de su estructura original, hoy en día puedes seguir viendo algunos restos de la ampliación realizada durante el siglo XIV y que incluyen e. De hecho, la buena conservación de estos restos hizo que fuera declarado como monumento histórico en 1949.
11. Castillo de Mora de Rubielos
Esta fortaleza es una auténtica joya de la arquitectura cívico-militar del gótico mediterráneo, situada sobre una loma de la Sierra de Gudar, en la localidad de Mora de Rubielos. Recorriendo su historia, descubrimos que la construcción original del Castillo de Mora de Rubielos fue realizada por los musulmanes, hasta que el rey Alfonso II lo recuperó en 1171.
Increíblemente hermoso por dentro y por fuera, si por algo destaca esta edificación es por su gran extensión, por su estilo románico y gótico y por sus cuatro fachadas y cuatro torres, todas ellas diferentes entre sí.
Manel
Su aspecto exterior es cerrado y sobrio y de su distribución hay que decir que era la típica fortaleza de aquella época con un amplio patio, rodeado por diferentes salas.
Además como todo buen castillo que se precie, esta increíble fortaleza elaboraba en piedra, cuenta con un puente levadizo, así como con un foso que rodea al recinto, una mazmorra y la torre del homenaje. Sea como fuere, esta fortaleza declarada “Monumento Nacional” en 1931, parece que siempre esté posando para una foto.
12. Castillo Ciudadela de Jaca
Otro de las fortalezas impresionantes donde los haya, es el Castillo Ciudadela de Jaca, que se encuentra en la localidad del mismo nombre.
Construida en la última década del siglo XVI, despunta entre otros castillos aragoneses, por su planta pentagontal, única en la época y por mantener en muy buen estado de conservación el foso, los cuarteles, los túneles y un puente levadizo. Sobre su interior hay que mencionar su plaza de armas, que también es pentagonal y está acotada por diferentes pabellones.
Carlos M. M
El Castillo Ciudadela de Jaca, declarado “Monumento Nacional”, debe su buen estado de conservación a su Ayuntamiento, que se encarga de su mantenimiento, así como de promover y difundir diferentes jornadas culturales en su interior.
La visita a esta fortaleza es muy recomendable, ya que puedes participar en exposiciones, en conciertos, así como en visitas guiadas.
13. Castillo de Valderrobres
Una de las grandes construcciones góticas de Aragón se encuentra situado al noreste de la provincia de Teruel.
El Castillo de Valderrobres es mucho más que una fortaleza, ya que fue residencia de varias familias nobles como los Oteyza y Don Pedro Martínez de Luna y desde su zona más elevada, se pueden disfrutar de las mejores vistas de la Comarca del Matarraña.
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Su edificación comenzó en el siglo XIV y de su maravillosa estampa, declarada “Monumento Nacional”, destaca su fachada, que es una de las más espectaculares del gótico civil de España. Todo el conjunto de esta impresionante fortaleza defensiva fue construido en piedra, debido a la abundancia de esta material en la zona.
Sobre su estructura, se sabe que el Castillo de Valderrobres está dividido en tres niveles, su planta es hexagonal y en su interior hay un bonito patio rodeado de diferentes salas. ¡Acércate hasta esta fortaleza y disfruta de sus espectaculares vistas!
14. Palacio de La Aljafería
A pesar de encontrarse en la ciudad de Zaragoza, el Castillo de La Aljafería es una de las fortalezas más emblemáticas de la comunidad de Aragón. No en vano, actualmente es la sede de las cortes de la comunidad autónoma.
El origen de este palacio fortificado, como su propio nombre ya indica, es de origen islámico. Así, era el lugar de residencia de los reyes hudíes en la entonces conocida como Saraqusta y fue construido en el siglo XI. Es un magnífico ejemplo de la arquitectura islámica, puesto que es el único edificio, de estas dimensiones, que se conserva de la época de los taifas.
Francis Raher
El elemento más antiguo de este monumento es la Torre del Trovador del siglo IX, a la cual se le añadió el palacio musulmán del siglo XI y que posteriormente se convirtió en palacio mudéjar. Durante el siglo XV, los Reyes Católicos levantaron su palacio medieval en la zona norte de este conjunto. Posteriormente, en la época moderna, este adquirió un carácter más defensivo.
En una visita a la Aljafería podréis descubrir una de sus estancias más bellas el Patio de Santa Isabel, aunque también cabe destacar el Salón de los Mármoles o el Salón del Trono.
15. Castillo de Albarracín
Albarracín es un pueblo que enamora a propios y extraños. No es solo uno de los pueblos más bonitos de Aragón, ¡lo es de toda España! Entre sus numerosos encantos, podemos encontrar sus casas rojizas y sus callejuelas medievales, pero no hay que olvidar su pasado como conjunto amurallado.
Efectivamente, las murallas de Albarracín terminan de darle ese toque tan encantador a Albarracín, con torres como la Torre Blanca o la torre del Andador. Dentro de este conjunto, lo más sorprendente es la alcazaba de origen musulmán.
En este caso, hablamos de un yacimiento del siglo X, un alcázar que se levantó sobre un peñasco de la localidad turolense. Sorprende por su gran nivel de conservación, gracias a una restauración llevada a cabo en los años 90, manteniendo toda la muralla y las torres circulares.
Se construyó sobre un antiguo asentamiento romano, y posteriormente pasó a convertirse en alcazaba, comenzando ya en el siglo XII a no ser prácticamente utilizada, salvo alguna excepción.
Tras este fascinante viaje por los castillos más hermosos de Aragón, solo nos queda invitarte a recorrer estas contundentes y hermosas fortalezas.
Pasea por el interior de sus murallas, respira su espíritu noble y siéntete un caballero o una princesa, aunque solo sea por un día.
¡Son lugares ideales para perderse y conocer Aragón!
1 comentario
Visité el castillo de Loarre, estando en Zaragoza, en una breve escapada a Huesca. Planeo volver y alquilar un auto para conocer estos maravillosos castillos