Casas rurales en Burgos

Burgos es una provincia de tamaño medio. Desde cualquiera de sus casas rurales podrás visitar todos los espacios naturales de relevancia que existen en la provincia.

Esta provincia Castellana, aunque no contenga grandes o reconocidos Parques Nacionales, nos ofrece espacios y monumentos naturales de una gran belleza y singularidad.

En el norte, en la vertiente castellana de la Cordillera Cantábrica se localiza el complejo kárstico de Ojo Guareña, un singular espacio protegido de terrenos de caliza y yeso que han dado lugar a espectaculares formaciones rocosas y galerías de cuevas. Esta red de grutas y desfiladeros está considerada como el sistema de éstas características más extenso de España. Muchas de ellas llevan habitadas desde el paleolítico como atestiguan los restos hallados y que datan de hace cientos de miles de años. Más recientemente, las órdenes religiosas del Medievo se instalaron en ellas, creando monasterios y ermitas dentro de las cuevas, transformando este espectacular paraje natural en un punto de interés cultural con un entorno de excepción. Existe un centro de interpretación en la cercana localidad de Quintanilla del Rebollar.

En los montes de los que nacen los primeros afluentes del Ebro, al noroeste de la provincia, se encuentra el valle del río Rudrón. Los mismos terrenos de rocas blandas que abundan en esta parte de la península han facilitado a las corrientes de agua el esculpido de verticales desfiladeros y profundas cuevas y simas. Un lugar especialmente destacado es el Pozo Azul, en Covanera, un manantial de puras y cristalinas aguas que surgen de una cueva inundada de más de 13 kilómetros y a cuyo final no se ha llegado todavía.

Al este, donde Burgos se une con Álava y La Rioja, se asienta el Parque Natural de Montes Obarenes-San Zadornil. Constituye una reserva de gran interés geológico, botánico y zoológico en una zona de transición entre las cordilleras Pirenaica y Cantábrica y está atravesada por el río Ebro. Un espacio natural que también cuenta con gran patrimonio cultural en sus inmediaciones y resulta idóneo para desconectar del ajetreado mundo urbano en contacto con la Tierra y con la Historia.

Otra zona de recomendable zona donde alquilar una casa rural, es la Sierra de la Demanda. Se ubica en el límite oriental de la provincia y está anexa a Soria y a La Rioja, en pleno sistema Ibérico y que cuenta con lugares tan especiales como las Lagunas de Neila. Un Parque Natural declarado en 2008, y que está formado por una serie de lagunas de origen glaciar de gran belleza que constituyen un marco perfecto para la pesca, el senderismo y el ciclismo.

Donde la meseta castellana alisa por completo a las últimas colinas del Sistema Ibérico, se alza la Sierra de Atapuerca, un lugar mítico declarado Espacio Cultural del Bien de Interés Cultural que suponen los yacimientos arqueológicos de Atapuerca, localizado a escasos kilómetros de la capital provincial. Alrededor del atractivo que supone todo este entorno, se ha creado el Parque Paleolítico Vivo, un parque zoológico dónde los animales viven en semi-libertad y que trata de recuperar y reintroducir las especies que habitaban la zona hace cientos de miles de años. Aquí es posible hacer un safari entre bisontes europeos y caballos Przewalski salvajes, en lo que es un verdadero viaje atrás en el tiempo que te sumerge en plena prehistoria.

Como veis, hay numerosos espacios naturales en Burgos. ¡Aprovecha y escápate unos días a una casa rural!

Disfrutar de unos días de verano en una casa rural con piscina te ayudará a relajarte y a disfrutar del entorno en plenas condiciones, también podrás acudir con tus amigos y familia a un alojamiento rural con barbacoa para comer como nunca en el mejor de los entornos.

Pero si prefieres visitar Burgos fuera de época estival, deberías decantarte por alquilar una casa rural con chimenea para entrar en calor después de un ajetreado día de turismo natural, o, aun mejor, encuentra una casa rural con jacuzzi para alcanzar el relax más absoluto y cargar las pilas a tope para tu vuelta a la rutina después de deleitarte con el paraíso natural e histórico que representa la provincia de Burgos.

Además, cualquier casa rural en la Ribera del Duero, es tu elección si lo tuyo es el enoturismo y la gastronomía.

Antes de que Burgos existiera, antes de que los romanos se asentaran en pequeñas villas a lo largo del cauce del río Arlanzón y muchísimo antes de que los pueblos celtíberos trabajaran la fértil tierra de sus inmediaciones; toda la zona llevaba poblada por humanos hacía casi un millón de años. A quince kilómetros del actual solar de la ciudad una, no muy alta, serranía sirvió de lugar de enterramiento a primitivos seres humanos, de especies ya extintas, que darían paso al actual Hombre. ¿Qué rituales y vida llevaron estos pobladores paleolíticos? ¿Se alimentaban de los bisontes y rinocerontes que pastaban en la virgen meseta que hoy conocemos como Castilla?

Todas estas respuestas continúan respondiéndose hoy en día en los yacimientos de Atapuerca. Lugar de prestigio mundial y de una relevancia científica transcendental que, desde su descubrimiento, ha arrojado luz sobre nuestra procedencia y sobre nuestro lugar en la naturaleza.

Durante millones de generaciones, quienes habitaron estas vegas fueron haciéndose con la tierra, aprendiendo a cultivarla y a domesticar las bestias. Numerosos asentamientos sedentarios han sido descubiertos también en las inmediaciones de Burgos, datados en fechas que se inician hace 5300 años y se prolongan por más de tres milenios hasta los primeros indicios de la sociedad civilizada celtíbera.

Superada la Edad del Bronce y con una península romanizada, la actual Burgos se reducía a unas pequeñas villas aisladas al pie de la vía Antonina entre las ciudades romanas de Segisama, hoy Sesamón, y Calagvrris, actual Calahorra, en La Rioja.

En el Medievo es cuando aparecen las primeras referencias a Burchia, como núcleo urbano con cierta relevancia. Las crónicas musulmanas cuentan cómo, en su avance hacia el norte peninsular encontraron un burgo especialmente fortificado en un cerro al lado del río Arlanzón; donde, en el siglo IX, las tropas de Alfonso III presentaron batalla para evitar su avance. Fue desde entonces cuando los burgos tomaron gran importancia en la defensa de la región por su situación estratégica. En torno al año 1000, Burgos ya había logrado la categoría de capital del Condado de Castilla.

En 1038, Fernando I se corona rey de León y se constituye el Reino de Castilla y Burgos es elegida como su capital. Pasada la mitad del siglo XI, el rey Alfonso VI cede el palacio de que poseía en la ciudad para construir en su solar la primitiva catedral románica de Santa María. Un lustro después de este hecho, en 1085, el propio Rey se hace con Toledo, y Burgos pierde su condición capitalina a favor de la nueva urbe conquistada, sin embargo, pese a este cambio, la ciudad continuó siendo próspera y mantuvo su gran relevancia en la política de los reinos.

También, en el siglo XI, en una pequeña población cercana, nace Rodrigo Díaz de Vivar, a la sazón el Cid Campeador, leyenda castellana de fama mundial y conmemorada por una impresionante estatua ecuestre ubicada en el centro de la ciudad.

En el siglo XIII, en uno de los mejores momentos de progreso y prosperidad que ha tenido la ciudad, se inicia, sobre la antigua catedral románica, la construcción de la nueva Caterdral de Santa María, inspirada en el gótico francés y auspiciada por el rey Fernando III y el obispo Mauricio. El edifico es un tesoro arquitectónico, está incluido en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO y alberga la sepultura del mítico Rodrigo Díaz de Vivar y su esposa. La Catedral fue terminada en el siglo XVIII. Desde entonces y hasta nuestros días, el edificio ha sido continuamente reformado y restaurado para que, si vienes a Burgos desde tu casa rural cercana, te maravilles con todo el esplendor de esta obra maestra de la arquitectura religiosa mundial.

Ya en el renacimiento, Burgos se renueva y se construye el monumental Arco de Santa María, una puerta de las murallas de la ciudad con un espectacular conjunto escultórico de gran valor artístico y arquitectónico.

Tras estos períodos de bonanza, la ciudad cayó en la decadencia causada, como en otras ciudades, por el Descubrimiento de América. Los lugareños emigraron hacia zonas portuarias más prosperas dejando al municipio casi despoblado y con grandes deficiencias de provisiones y recursos.

La población fue recuperándose poco a poco con continuas reformas y mejoras de los servicios para comerciantes y lugareños que tardaron en dar su fruto. Como el resto de ciudades españolas, Burgos participó y sufrió los estragos de las guerras decimonónicas y de la Guerra Civil Española. Ya en este siglo XXI, Burgos se erige como destino de turismo de interior, cultural y gastronómico a la sombra de su magnífica Catedral, su singular Castillo y su vanguardista Museo de la Evolución.

Como ves, esta maravillosa ciudad, es una visita obligada si decides pasar tus vacaciones alojado en una de las casas rurales en la provincia de Burgos.

Al sureste de la capital, en plena Sierra de la Demanda, se localiza el Monasterio de Santo Domingo de Silos, ubicado en el municipio homónimo. Te recomendamos pasar unos días en una casa rural en Santo Domingo de Silos para que puedas empaparte de la historia de este lugar y disfrutar del magnífico entorno natural que ofrece la comarca.

El famoso monasterio es una abadía benedictina fundada en el siglo VII, todavía en uso por los monjes que ofrecen al visitante sus profundos y emocionantes Cantos Gregorianos. Además todo el conjunto arquitectónico es un prodigio del gótico., declarado Patrimonio Histórico de España y Bien de Interés Cultural desde 1931.

No muy lejos de Santo Domingo de Silos, en el centro del tercio sur de la provincia, se encuentran Covarrubias y Lerma. Dos localidades que rebosan Historia. En Covarrubias, cada uno de sus rincones respira la esencia de todos los acontecimientos que ocurrieron en sus calles y que conformaron la idiosincrasia del Reino de Castilla y, a la postre, de España.

Uno kilómetros más al oeste se alza Lerma. Una villa castellana llena de singulares edificios entre los que destaca el Palacio Ducal de Lerma. Una construcción renacentista del siglo XVII inspirada en el Monasterio de San Lorenzo del Escorial, que hoy luce restaurada y está abierta al público como Parador Nacional.

Estos tres pueblos, conforman el conocido como “Triángulo del Arlanza", nombre que toma del río que los atraviesa, y donde, a parte de maravillarse con sus encantos culturales, es una zona perfecta para deleitarse con la rica y tradicional gastronomía castellana.

Anímate a explorar estos tesoros desde cualquiera de las casas rurales en Lerma o en Covarrubias.

Al norte de la provincia y a orillas del río Ebro en dos espacios naturales de envidiable belleza están Orbaneja del Castillo y Frías.

Orbaneja del Castillo es el primer pueblo burgalés que se encuentra el Ebro cuando abandona su natal Cantabria. Este pueblo es espectacular. Se encuentra encajado en un escarpado y profundo meandro, a los pies de una impresionante formación rocosa de arcos de piedra naturales y verticales fachadas de calizas y yesos cinceladas por el agua y el viento; tal y como hicieron en el cercano Pozo Azul y en todas las profundas y hermosas grutas que horadan toda la comarca. Te recomendamos que reserves una casa rural en la comarca de Páramos, y disfruta de Orbanejas del Castillo, de su entorno natural sin parangón y de sus coquetas calles flanqueadas por casas de piedra y repletas de excelentes restaurantes.

Cuando el Ebro ya se prepara para abandonar Burgos, en pleno Parque Natural Montes Obarenes-San Zadornil se ubica Frías. El municipio, que ostenta el título de ciudad, se asienta sobre un cerro, que pone de manifiesto su origen militar. En estas tierras se libraron batallas en el inicio de La Reconquista y la ciudad de Frías fue un emplazamiento estratégico de máxima importancia. Sus calles todavía conservan el trazado medieval y las vistas desde su Castillo nos permiten divisar un majestuoso paisaje. Existen magníficas casas rurales en Frías; escoge la que más te guste y ven a descansar a esta particular e histórica tierra.

Ahora que conoces en profundidad todo lo que la provincia de Burgos puede darte, ven y alójate en cualquiera de sus casas rurales para reposar, cargar las pilas y disfrutar de su privilegiado entorno natural y de los cientos de miles de años de Historia que la contemplan.